El flujo de remesas provenientes de guatemaltecos que residen en el extranjero, principalmente en Estados Unidos, continúa en aumento. Durante los primeros tres meses de este año, la economía de Guatemala experimentó un incremento del 5.9% en la cantidad de dólares recibidos en comparación con el mismo período del año anterior. Este incremento ha permitido que millones de hogares guatemaltecos reciban un total de 4,682.6 millones de dólares estadounidenses, los cuales se destinan principalmente al consumo diario.
Según los reportes del Banco de Guatemala, se prevé que en 2024 se alcance un nuevo récord en la cantidad de divisas enviadas por la comunidad migrante. El año pasado, el ingreso de divisas alcanzó los 19,804 millones de dólares estadounidenses, equivalente a aproximadamente 158 mil millones de quetzales, lo que también contribuyó a un crecimiento del 4.1% en el Producto Interno Bruto (PIB).
Este fenómeno no es exclusivo de Guatemala, en toda Centroamérica las remesas están alcanzando niveles históricos. Durante el 2023, los cuatro países de la región: Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua, recibieron casi 42,000 millones de dólares en remesas, lo que representa aproximadamente una cuarta parte del PIB combinado de estos países. Por otro lado, en países centroamericanos con una menor tasa de emigración, como Panamá y Costa Rica, las remesas representan una porción mucho más reducida de su PIB, alrededor del 1%. Esto resalta el papel significativo que juegan las remesas en la estabilidad económica de aquellos países con una alta tasa de emigración, donde las divisas enviadas por sus ciudadanos en el extranjero son vitales para el funcionamiento del sistema financiero y, en última instancia, para el desarrollo económico nacional.
Marzo 2024, y el comportamiento general para el mercado guatemalteco
Los ingresos durante el mes de marzo fueron muy similares a los del año pasado, dejando un total de US$1,686.63MM como resultado de las remesas familiares. Esta variación sobre el 2024 reflejó un incremento de tan solo 1.2%, pero es importante destacar que pese a que sí hubo un incremento, el ticket promedio de envío decreció alrededor de US$25 para este período.
En nuestra opinión, estas alteraciones en el comportamiento habitual del flujo de remesas están directamente relacionadas a la atípica temporalidad en la que se llevaron a cabo las festividades correspondientes a la Semana Santa ya que a partir del Miércoles Santo la tendencia comenzó a la baja, y fue hasta el 1ero de abril donde la misma se recuperó. Este argumento podrá ser confirmado cuando tengamos disponible la data consolidada de abril, donde podremos determinar si las variaciones se deben a los factores antes expuestos o confirmar si es eminente la tan mencionada recesión en Estados Unidos.
Queremos saber tu opinión, ¿cómo ves el panorama de las remesas para los próximos meses?, déjanos tu respuesta en los comentarios.
